sábado, 28 de julio de 2012

Renacer (1999)


He de introducirme de nuevo en tus entrañas
Y construir en tu interior un refugio que me guarde,
De la vida misma y contra el dolor que me invade,
Que me inicie el tiempo o que lo pare,
Que me acoja en tu interior y que me calme.


Solo en tu interior muelle y amable
Se pueden restañar mis heridas vitales
Solo en tu interior vaginal y sensible
puede mi cuerpo rendirse y conquistarte
y sin lograr la victoria, renunciar al combate.


Solo en tu interior, fetal y oscuro,
Puedo mantener mis ojos apagados.
Solo en tu interior, claustral y placentero,
Puedo aguardar, esperanzado, el nacimiento
Sin sentirme resentido ni expulsado.


He de nacer de nuevo de tu vientre
Siendo al mismo tiempo origen y destino.
Para enfrentar la vida con un talante nuevo.
Que me permita nacer como inocente,
Y superar así la culpa que ahora siento.

Reflejos (11-2000)


Reflejos, son solo reflejos
que el tiempo a su paso deja.

Algunos teñidos de amor,
otros con rencor y violencia,
con el rumor de las risas,
con el aroma del miedo,
con la textura del odio,
pero, con todo, apariencias.

Reflejos, son solo reflejos
Que el paso del tiempo nos crea,
Son solo reflejos
Que el tiempo al pasar se lleva.

Poliedro


La existencia es un poliedro
Con tantas caras como instantes tiene el universo,
Y en cada una de esas caras he de recrear mi vida,
Y cada una de ellas es solo la cara visible de un poliedro
Con tantas caras como instantes distintos haya podido tener el universo
Y en cada una de ellas existo y me miro, sin conocerme a veces,
Y cada una de ellas es solo un instante visible de un poliedro
Que tiene tantas caras como instantes imposibles tiene el universo
Y en cada una de ellas he de imaginarme, y en otras no puedo,
Ni siquiera
Y al fin y al cabo este universo no es mas que la cara visible de un poliedro
Cuyas caras no puedo ni siquiera alcanzar a enumerarte.

Parado (08-2000)


Ahora me planto,
Me quedo callado  y quieto.
Ni una palabra de más,
Ni un rumor, ni un lamento.
Solo ponerse al acecho
Sin esperar nada concreto,
Sin concretar nada en la espera,
Solo tensar el tiempo.
Para ver si el tiempo me espera.


Uno , dos, tres.
Los momentos van pasando
Sin que nada en mí se mueva.
Pero cuento
Y eso, en si, ya es un movimiento
Tengo que pararme más
El logro será evitar
La sombra de un pensamiento.
He de poder lograr
Situarme en el momento
En que mi cuerpo en suspenso
Haga detenerse al tiempo
Sin que llegue a estar muerto
Y entonces poderme asomar,
Poderme mover sin que haya movimiento.


Oscuridad (1999)


Se me apretó la oscuridad a las entrañas
Me ciñó el miedo con mi entorno,
Durante un instante me encontré abandonado,
Por un momento no supe encontrarme.
“Moriré”, susurraban los silencios.
“mas tarde o mas temprano”, comentaban los rincones
nada parecía ser como yo lo recordaba.
Con un espasmo reclamé la luz para mi auxilio
Alumbrado todo era tal como pensaba.
Pero en algún sitio, no sé en donde,
Intuía que lo oscuro me acechaba
Y guardaba para mi, con inquina, sus palabras.

Oración a la Muerte (09-1998)


Deja que sacie en vivencias compartidas
Mi camino hasta tu encuentro
Olvida pronunciar mi nombre
Cuando el momento me nombre
Reclama solo a aquellos que creen necesitarte.
Elimina tu presencia en mis instantes
Mella con años y risas el filo de tu guadaña
O, simplemente, muere.

No Importa


No importa lo que diga, lo que escriba,
ni siquiera importan la verdad o la mentira,
el amor o la perfidia,
un lado u otro de la línea.
Lo único que importa es la vida
porque el muerto no camina,
no se ofende, ni respira.

Nada


No existe nada,
y es nada lo que clama
y arrastrándose pasa
por dentro de mi.
Y son nada,
no existe la duda,
lo que silba y lo que habla.

Y lo que bulle,
lo que anda,
lo que vuela,
también es nada.

Y nada es
porque no es nada
lo que me hunde
y me arrastra.
Y lo que me llama
y me habla
de la paz de la muerte,
tampoco es nada.
Porque nada es el principio
aunque el final no sea nada

Y puesto que nada nos une
no nos separará nada.
Porque nada condensa
el límite que separa
dos mundos con nada en común.

Y lo que bulle,
lo que anda,
lo que vuela,
también es nada.

Es el punto que no es nada.
Es el principio que es nada.
Y es nada,
no existe la duda,
lo que silba y lo que habla.

Y todo cuanto tocan mis dedos
revierte en nada
porque nada es la esencia
y lo que imagino es nada.
Porque nada es la existencia
y es la presencia nada.
Porque nada es el principio
aunque el final sea nada.

Absolutamente nada.

Mundo Material


En un mundo material la fantasía,
no es mas que un valor en alza,
no hay historias que no acaben,
no hay historias que terminen,
no hay seres que revivan en su mente
lo que sus ojos le cuentan.
Todo esta acabado en un sinfín,
nada termina sin un fin.
Nada existe sin venderse
nada que se venda deja de existir.
El amor interesa si interesa
La verdad es maleable a la razón
Los ríos son energía, el cielo un camino
El paisaje moldeable, la lluvia necesaria
Y tu y yo pasajeros sin  tiempo para mirar.

Movimiento


Existo en tanto que me muevo,
y en tanto que me muevo me conozco.
Os conozco si me lleva el movimiento,
si  me aleja el movimiento os olvido.
Se está moviendo el aire y me acaricia
Se está moviendo el mar y me adormece,
se mueve la cuna que me mece,
se mueve la vida que se inicia,
se mueve mi vida que envejece.

Al final solo tengo movimiento,
la distancia en que yo me haya movido.
Si se para el movimiento yo me paro,
Y si me paro se acaba mi camino.

Montealegre (1998)


El aroma del monte se me asemeja
Al de la piel de la niña que es mi pareja.
Ella huele a romero, él a perfume
Y la brisa que llega entre el follaje
Trae el efluvio encendido de su paisaje.
Es el color de la hierba el de sus pechos
Y el sabor de las hojas el de sus besos.
Piñas como pezones, hojarasca de abrazos tiernos
Los caminos del monte son sendas en que mis dedos
Caminan su cuerpo sin que los velos, sin que las ramas,
Que en él me encuentro, sean capaces de detenerlos.
Y el ombligo de la niña, angosto, umbrío y tierno,
Es hondonada donde escondernos.
Se estremece el monte con las caricias
Y la niña se empina para alcanzarme
Un poquito mas dentro, entre sus carnes
Me llama el murmullo que canta su vientre.
Se estremece el paisaje con mi osadía y, cuando
Al volver la calma tras un jadeo, me vuelvo a verla
Veo su cara de pétalos tiernos, veo sus ojos de riachuelo
Veo su cuerpo, veo su suelo, y los poseo.
Porque el monte me ama y yo lo sueño
Porque la niña me invita a poseerlos.


Cuanto te quise niña, cuantos anhelos
Cuantos recuerdos monte, cuanto te quiero.

Mis Chapas


He vuelto a abrir la bolsa
después de largos años.
Inertes esperaban a mi mano
como soplo de vida que no llega.

Mis chapas, viejas compañeras,
quitaban con sus brillos importancia
a sus pobres esquinas oxidadas.

Aun tenían sus papeles, plastilina,
con los nombres de figuras
de hace tiempo, futbolistas,
ciclistas,... todo un mundo paralelo.

También hoy, por eso lloro,
entendí que al mirarlas no se eleva
el rugido de pistas y de estadios.

Ya no están con ellas los clamores
que antaño despertaban en las masas.
Mi garganta ya nos las aclama
en su pase perfecto o pedalada.

Ya no, ya solo son chapas,
y un poco con su vida va la mía
y hoy soy consciente de que pasa.

Mirador (08-04-1997)


Acodado en el tiempo,
desde el balcón de la vida (mía)
pasean ante mis ojos
casi todos por calles estrechas,
alguno por amplia avenida,
hombres que no me interesan,
mujeres que no me perturban,
seres que, tal vez, también me contemplan
con la misma feroz apatía,
con la misma cortés simpatía
con la misma mirada abúlica,
con que yo contemplo su vida.


Y es tan así que
nada les doy pues no me motivan,
nada les quito pues no los envidio,
nada me dicen pues no los escucho,
nada les digo pues no me oirían
no se interponen porque no son presencia,
no los estorbo por falta de esencia,
no los motivo porque apenas me intuyen
mis semejantes
a los que no me parezco pues me destruiría.

Lo Recuerdo


Cada piedra que me encuentro,
cada rincón, cualquier viento,
no es nuevo, no en el tiempo.


Esas risas que se oyen, esas,
divertidas siempre, traviesas.

Esas actitudes graves,
esas caricias primeras
temerosas y suaves.

Aquellas primeras niñas,
el juego de la cerilla,
nuestros primeros guateques,
la pandilla.


Los recuerdo muy bien,
está claro el recuerdo.


Lo recuerdo muy bien,
el tiempo no lo ha borrado.
Está claro el recuerdo,
la vida no lo ha borrado.

Legado (11-2000)


Silencio,
Hay que pasar en silencio
junto a las guaridas del miedo,
del poder y del dinero,
de las armas y del clero,
que no se enteren de que paso,
que no olfateen mi miedo.
El silencio es mi única pujanza,
Callar y mantener la calma.
Hay que esperar a que llegue el momento
En que nadie empuñe un arma,
En que el dinero no valga,
En que los hombres buenos
Dejen de ser una masa.
Y si yo no llego a verlo
A mis hijos lego el silencio,
La cautela, el miedo y la esperanza.

La Muerte Es Solo un Instante


La muerte es solo un instante,
No importa lo que dure la agonía
Ni importa el amor con que nos cubran.
Se  muere sin que el tiempo transcurra
Se muere justo después de estar vivo
Sin barreras, sin fronteras que lo marquen
La memoria de los vivos lo deforma
Porque la vida es esclava del tiempo.

La muerte no es dolor ni es sufrimiento
Ninguna muerte tarda en llegar,
nadie resiste.
La muerte no dura ni un instante,
El que separa la consciencia del vacío
El que separa al silencio y la palabra.
La muerte no es tiempo ni frontera
No es espacio, no es barrera.
La muerte es un mito, una quimera.
La muerte es solo un instante.


Aunque el dolor sea infinito
Aunque el sufrimiento se interponga
Aunque el quebranto sea patente
Aunque la lucha sea evidente.
La muerte no es más que un instante.

La vida previa le es ajena
La vida posterior la desconoce,
La muerte es solo consecuencia
Que su mismo nombre niega.
La muerte es solo un instante

lunes, 23 de julio de 2012

Gota en el Río (11-2000)


Yo quiero seguir siendo río,
Yo no quiero ser cascada.

Jugar siempre en el cauce,
Besar, al pasar, las ramas,
Girar libremente en el curso
Mezclarme con las arenas
Y en las rocas, salpicada,
como tobogán que resbala
dejarme caer en la charca
y luego hilo fino que vuelve,
disciplinado, a las aguas.

Yo quiero seguir siendo río
Yo no quiero ser cascada

Pero el rumor se acrecienta
A cada momento que pasa,
Cada vez con más premura
Cada vez en voz más alta
El rugido que nos llama.
Cada vez me siento más turbia
Y presiento que el río se acaba.

Yo quiero seguir siendo río
Yo no quiero ser cascada.

Se murmura en los remansos
Que después de ser  cascada
Son las aguas más claras
Las orillas más bajas
Los remansos eternos
Y que toda gota que salta
Navega en un río tan grande
que abarca a todas las aguas.


Yo quiero seguir siendo río
Yo no quiero ser cascada

Seguir discurriendo entre juncos
Seguirme enredando en las ramas.
¿Que sé yo de otros ríos?
¿Que puedo saber de otras aguas?
Yo quiero seguir siendo río
En el curso que ya estaba.
Yo quiero ver las orillas
Aunque a veces sean altas.
Y  con la voz que me queda os digo
Yo no quiero ser cascada
Y si no me queda más río
No quiero saber que me aguarda
Ni una nube que me lleve
De nuevo a la fuente que mana,
Ni la cascada más alta.


Yo quiero seguir siendo río
Yo quiero seguir siendo agua.

Fantasía (Ourense, 09-1998)


Lloró, esta tarde, el cielo sobre mi vida
Y le pregunté al instante que penas tenía
Me contestó que no tenía pena ninguna
Que solo tenía nubes y viento
Que al juntarse las gotas, como pesaban,
Las dejaba caer, y así llovía
Y lloviendo llevaba toda la vida,
Que llorar el cielo solo es poesía.

Estoy Decidido


Estoy decidido a pasear ni amor
por las estancias mas lujosas del planeta.
Gritarlo con las campanas del Big-Ben,
reclamarlo en los patios de la Alhambra,
cantarlo en lo alto de la Torre Eiffel,
sacralizarlo en el altar mayor de Santiago,
consumarlo en un lecho del palacio de Sissi,
correr tras sus frutos por los jardines de Aranjuez.


Estoy decidido a pasear mi amor
por cualquier lugar que la vida me marque.
Gritarlo desde el candor de una cuartilla,
reclamarlo con mis besos a diario,
cantarlo a todo el que quiera escucharme,
sacralizarlo cada día en cada acto,
consumarlo en el lecho en el que duermo,
correr tras mis hijos por la calle.

Engañados



Cuando yo me fui
tú ya te habías marchado,
pero es tanto el tiempo
que estando juntos ha pasado
que te busqué en el último momento
sin una razón, sin un lamento,
tan solo la costumbre del pasado,
tan solo la añoranza del encuentro.


Busqué un rescoldo que alentara
los recuerdos que venían a mi mente.
Tantas vivencias, tantas historias
tanto espacio ocupado en mi memoria
debieran de tener sólidos cimientos,
pero basta una brisa y en momentos
el amor no es mas que una quimera,
no un engaño, ni siquiera,
tan solo una forma de espejismo
que ya murió sin que naciera.


Durante tanto tiempo la costumbre
imitó al verdadero sentimiento
y con sus artes encubrió sin que se viera
el vacío que existía en nuestras vidas
las caricias sin entrega, repetidas,
el rescoldo que tomamos como lumbre
el acuerdo que evita enfrentamientos
que evita mirar al desamor que compartimos.
Engañados al final nos distanciamos
construimos con distancia una defensa
un parapeto que escondiera el desengaño,
y el amor y la verdad quedaron fuera,
dentro solo tolerancia y sufrimiento.


Empeño (31-05-1998)


Saber que todo lo que quieres es perecedero
Y empeñarte en el empeño con tu sola voluntad
Con solo tu anhelo
En cambiar el tiempo y convertirlo en eterno
Y cuanto más te falta más empeño pones en ello
Y cuanto más desaparece mas te empeñas en preservar el resto
Y así cada día es un comienzo
Y así cada noche es un receso
Sin conocer el descanso
Sin atisbar el premio, solo la lucha, el esfuerzo
La constancia, el anhelo.

El Puñal


Una luz en la punta,
para guiar.

Una fuerza en el puño,
para enterrar.

Un dibujo sobrecargado
que se hace rojo.

Un sentimiento de enojo
que lo maneja.

Una triste madeja
cae a los pies.

El Fracaso (06-1998)


Me he sentado frente a tu retrato
Girando el anillo que en mi dedo
Me recuerda momentos del pasado
En que estuvimos juntos, apoyados
El uno en el otro sin desmayos,
Y ahora mi flanco descubierto
Muestra la herida de tu ausencia,
El pecado de no haberte retenido,
El inmenso vacío del fracaso.

No importan tras este tiempo las razones,
Ni importa tampoco quien las esgrimiera,
No importa si te fallé o nos equivocamos,
Da igual si me fui o te marchaste.
Lo que importa es que ahora, recordando,
Aquí sentado, contemplando tu retrato,
Añoro los momentos que se han ido,
Incluso los momentos más amargos.

Si me atreviera a llamarte, y tu quisieras,
Podríamos volver a intentarlo,
Sabiendo de antemano que es difícil,
Sabiendo que tu amor, que mi amor,
Han seguido caminos diferentes,
Madurado junto a gentes muy  distintas,
Conocido caricias más galantes.

Pero al hacer mi mano el amago,
Al comprender mi mente lo que intenta
La detiene en el último momento
Y le susurra con tono  competente:
“¿Podremos soportar, otra vez, este fracaso?”

El Escondite



Es tiempo de estar muy callado,
de que pasen las palabras de los otros
sin que sepan que las mías las contemplan.


Otorgado a la cautela y clandestino,
escuchar que se acercan y me cercan,
y sin miedo no moverme, no decirles.


Cauto, avanzar a su encuentro procurando
que no llegue a producirse, y temblando,
evitar que me tiemblen los sentidos.


Finalmente, porque pasa el tiempo y no me encuentran,
salir a su encuentro de improviso,
y encontrarme, sonriente, que se han ido.

Día a Día (10-2000)


Día a día la vida transcurre a mi lado
Y día a día olvido el tiempo para contemplarla
Día a día, al acabar el día, observo horrorizado
Que otro día pasó sin dejar en mi memoria un solo trazo.
Día a día se que tengo un día menos
Y día a día me prometo un día pleno.
Día a día incumplo mi promesa y sin quererlo
Día a día maduro, me enamoro, avanzo y muero.

Solo el hombre existe día a día
Ningún otro ser conoce esta medida
Que el tiempo aprisionado nos ofrece, esclavizado,
Como presente rencoroso, emponzoñado.
Y solo el hombre día a día contempla, fascinado,
Como el tiempo que le queda disminuye día a día
Y la muerte se le acerca cada día que ha pasado.

Devorador


Cuanto terreno desperdiciado para un espacio sin paisaje
Tanto frenesí en el combate para que luego, sin saber por que,
Sin saber como ni cuando, todo sea un escenario con el telón atorado.
No sube, no baja, no venzo ni me vencen, pero...
Me conquistan, conquistan mi tiempo que apenas existe
Mi tranquilidad que no es mas que espacio entre zozobras, y mediante
Sus reglas ahogan mi ansia, solo de ser yo mismo
Solo de ser uno mas entre otros que también fueran.
Pero el devorador no lo admite, mi paz es su alimento
Y no ha de cejar hasta que no haya muerto, y aun entonces
Podré morir sin su permiso?, podré descansar sin que me acose?
Podrán los que me recuerden recordarme sin sobresalto?.
Nada es mío, no mi vida, ni mi suerte,
 nada te puedo ofrecer salvo una lucha sin cuartel.
(en la que a veces yo soy el enemigo).

Destino (La Guardia, 08-2000)


Limitado a la molicie, abandonado el pensamiento
Navego la corriente tal como me lleva
Y su vaivén me duerme y su rumor me ensueña.
Ni giro los recovecos que su curso dispone,
Ni pienso en el tiempo que su discurrir me impone.
Solo un leve balanceo,
Solo un frondoso cantar que me acomoda.
No pienso porque me navegan
Y en el lento, en el alto, en el remansado transcurrir
me abandono.

No es de mi incumbencia mi destino
Pues no puedo adivinar su recorrido,
Ni cambiarlo, ni invertirlo.
Cuando las aguas confluyan, confluiremos,
Cuando el curso finalice su camino, moriremos
Y en el cielo, en las nubes, navegando
Habremos de esperar otro camino.
Seguiremos su curso nuevamente,
Una gota más en un torrente
Sin esperar jamas, sin ni siquiera imaginar,
Que pudiera haber un último camino

Destino


Hay fuerzas que me exhiben,
que me recorren por dentro y todo lo alumbran,
y descubren aquello que no quisiera,
ni siquiera en el fin,
ver lo que soy, ver lo que tengo.

Verme por dentro y verme hacia afuera,
impulsado en el tiempo que todo lo quema,
resabiando, por fuerza, de todo lo humano,
diciendo, de antemano, cual es mi fuerza,
cual es mi puerta, donde mi mano.

Y así me rebelo
y aunque paso mi paso y tropiezo
por los puntos que antes viera marcados,
saliendo del pueblo, pasando el roble, el río o el sueño,
me desvío y me alzo, me escapo por donde puedo
para poder decir que mi vida es como yo quiero.

Y sé que no logro saber lo que quiero,
 pues aún antes del momento ya dudo,
 ya siempre,
 si al soñar me despierto y me duermo en el sueño,
 o si es mi consciencia la que se libera en ello.

Con la duda se hermana el tormento
y aliados a un tiempo me atacan y acaban
sin dejarme por muerto,
pues cuando acaba la cura arrecian su fuego.

Y es ya, por mas que lo dudo,
una forma extraña de juego
donde yo soy el objeto que ha de recorrer el camino correcto.
Y si me niego me dan un efecto
y vuelvo a caer en el sitio que quieren.
Y si sigo recto es mayor el tormento.

Descanso (11-2000)


Ven
Y repara en lo que puedas
La aspereza que la vida
Va dejándome en la piel

Abrázame
con los brazos que imagino
Que se amoldan a mi cuerpo
Y me acunan sin mecer

Arrúllame
Con los cantos de las aves
Con el rumor de las olas
Con palabras de mujer

Háblame
con la voz de todos los seres
con el ulular del viento
con un nuevo amanecer

Bésame
Con el sabor de tus brisas
Con el olor de tus flores
Con besos de agua corriente.

Cántame
Como cantan las cigarras
Como cantan las sirenas
Con las canciones amadas
Que se escuchan y se guardan.
Con todos aquellos sonidos
Que me hacen sentir el alma.

Yo permaneceré alerta
Siempre atento a tu llegada
Siempre esperando tu abrazo
Siempre escuchando el sonido
Por escuchar tus palabras
Por escuchar  tus canciones
Y al final, cuando al fin llegues
Sabré que todo se acaba.

Fabula de la Circulación


Se encontraron en la selva,
el paso era muy estrecho,
y en vez de ponerse de acuerdo
se pusieron al acecho.

El rino lo vio llegar
y a toda velocidad
fue a meter el cuerno
para no dejarlo pasar.

Aunque fue casi al mismo tiempo
llegó el elefante mas tarde,
pero puso la trompa en medio...
en medio de todo un alarde.

Se mentaron a sus madres,
se insultaron sin respeto,
se tacharon de cobardes
en repertorio completo.

Sin importarles ya nada
mas que imponer su razón
armaron un gran tapón
al resto de la manada.

El como acabó la cosa
no es realmente importante
si no reflejar el talante
y la actitud primorosa.

Que sucedió es bien cierto
y el traerlo a colación
no tiene, en si, mas razón
que hacer un llamamiento:



Ciudadanos de la selva,
no solo elefantes y rinos,
vacas, cabras, pollinos
y el resto de la caterva.


La convivencia es ciencia
que no requiere de luces
si no mas bien de paciencia
y ceder el paso en los cruces.


Y al que hace gran alarde
de tener siempre razón
se ve que en una gran parte
la falla la educación.

Culebra (10-1999)

Culebra, culebra
Que el agua me lleva
Corriente adelante,
Un arco, una piedra,
Me encuentro con otro
Y juntos los dos

Culebra, culebra
Que el agua nos lleva
Corriente adelante
Un arco, una piedra,
Hay otro que espera
Y ya somos tres

Culebra, culebra,
Que el agua nos lleva
Corriente adelante 
Un arco, una piedra
Seremos ya tantos
Que olvido quien soy

Culebra, culebra
¿Recuerdas el agua?
¿Recuerdas el arco?
¿Recuerdas la piedra?
Somos la corriente,
Pero, ¿quien soy yo?

Cuatro renglones


Ensoñarse en el recuerdo
no dejando ni un momento
que se me olviden los besos,
que se aflojen los abrazos,
que se pierdan los amigos,
que se borren los paisajes,
que los amores marchiten,
que los placeres se aplaquen.


No permitirse el olvido,
no relajar la añoranza,
no dejarse en el camino
ideas, ni esperanzas.
No limitarse en la vida
a ver el tiempo que pasa.


Hay que agarrarla bien fuerte
como si alguna vez se acabara,
hay que apurarla sin tino
por si alguna vez terminara.


Hay que hacer un disparate
de cada instante que pasa,
hay que hacerla escaparate
de la vivencia y la farsa.
Y el tiempo, el tiempo corrido,
le presta cuerpo al dislate.


Recuerdo , presente y mañana
en cuanto se ponen escritos
no son mas que tiempos marchitos
que al escribirlos se escapan
que al reflejarse se clavan
que se imprimen en el alma,
que sin quererlo destapan
la vida y la hacen esclava.


  
Y queriendo retenerla
la cuento a todo el que pasa,
y queriendo que sea mía
la convierto en una trama
que al reflejarse se enfría,
que al olvidarse se ama.


Y aun en ese momento
no sé si le canto a la vida,
si escribo sin fundamento,
si predigo una despedida,
si estoy reflejando un tormento,
si es que la siento perdida,
si es que la siento muy dentro,
muy mía,
muy fría,
muy lejos,
reflejos.


Quizás no es mas que una hoja
llena de pretensiones.
Palabras sin mas que se arrojan
y forman cuatro renglones.

Casi Una Vida


Claro, claro, viene el día.
Claro, claro, clareando.
Clara se viene la noche
cuando el día esta acabando.


Frescas, frescas, brotan las flores.
Frescas, frescas, van brotando.
Frescas las flores se mustian
cuando empieza el verano.


Bravas, bravas, vienen las olas.
Bravas, bravas, van bramando.
Bravas llegan a la costa
que al llegar las va aplacando.


Liso, liso, viene el río
Liso, liso, va corriendo.
Liso se llega hasta el mar
que al llegar lo va engullendo.


Alto, alto, llega el arbol.
Alto, alto, va creciendo.
Alta le llega la llama
cuando lo esta consumiendo.


Quedos, quedos, vienen los años.
Quedos, quedos, van pasando.
queda se viene la muerte
y la vida va terminando.

Cántico de Borrachera


Bebe tú tus lagrimas
y luego escánciame una copa.
Bebamos hasta que se seque nuestra boca
y nuestro aliento sea un vaho infecto.


Cantaremos luego con voz ronca
los cánticos que salgan de estos pechos,
y más tarde, tumbados en los lechos,
vomitemos los cantos y los llantos.


Bebe tú tus lagrimas
y luego escánciame una copa
que si esta noche la muerte nos arropa
cantaremos un cántico de adiós.


Y una vez que llegue la mañana,
una vez muertos y encontrados,
estarán todos los cánticos cantados
y no habrá ni una gota que beber.

Borracho


Te encuentro a veces
acodado en el limite de tu mundo,
paseando sobre él tu mirada finitamente distante,
extrañamente atenta  a todo, sin fijarse en nada,
Un poco mas allá del tiempo,
sumido en un espacio que arrastras en tu movimiento
integrado en un lugar porque tu lo has creado,
hablando sin dirigirte a nadie, y sin hablarles,
solicitando con el tono la respuesta de todos,
encaramado a una consciencia intermitente,
envuelto en una lucidez equivoca,
y sin saberlo,
juzgando a un mundo que ya te ha juzgado.
Un día y otro día, solo la sombra los separa,
solo la luz es distinta, sentado, apoyado en la barra.

Besos


Hay besos con sabor a carne,
hay besos con sabor a helecho,
y otros con bouquet de lecho.
Los primeros, tus primeros,
los de esta noche, postreros.
Los de seductor, los de seducido,
aquellos en aquel momento,
ni olvidados, ni perdidos.
Besos de rosca, a tornillo,
aquellos de queso y membrillo,
los de verano, salados,
los que están predestinados.
Besos todos, besos dados,
ni perdidos ni olvidados.

Belleza (Ourense, 09-1998)


Con el aspecto de lluvia te he conocido
Entre los rayos del sol, bajo la luna,
Azul de agua y espuma, nubes y cielo.
Radiante de primavera, fría en invierno
En el otoño ocre de hojas y tierra
Asomada entre flores de brote tierno
En el verano dormida, pasando el tiempo
Con cuerpo de mujer, solo en sus ojos,
Entre risas de niños, al mirar de reojo,
Y con tantos aspectos, tan diferentes,
Y en tantos momentos, tan especiales
Que si me esfuerzo te encuentro en cualquier parte
Y a veces te encuentro aun sin buscarte.

Bagatela


De frente, te espero.
No oculto la cara ni quiero
ocultarle a mis ojos tu aspecto,
fiero.


Quiero así esperar, circunspecto,
como han de esperarte los hombres,
sin miedo.


No quiero, en fin, que me asombres,
ni arranques de mis más lamentos,
se fueron.


Con la rabia que dan los tormentos,
y el dulce sopor de estar muerto,
bien muerto.


Amor Y Convivencia


Que fácil es amar sin conocerse
Amarse sin tener que compartir los desalientos,
Amarse sin tener que enfrentarse a las costumbres
Con las que el otro, cotidianamente, nos agrede.
Sin que el tiempo nos haga ver las huellas
Con las que solo la vida compartida nos sorprende.

Que fácil es amar solo en la cama,
Imaginando que no haya otro mundo mas que ese,
Que no hay mas reloj que las caricias,
Mas calendario que el que cuenta los orgasmos compartidos,
Mas motivo para vivir que huir de la vida por momentos


Que fácil es mirar con pasión a ese extraño,
Al que no hay que coserle los remiendos,
Al que no hay que ver deformado y cotidiano,
Al que no hay que pedirle el dinero que no llega
Al que no hay que soportarle las dolencias ni los duelos


Que fácil es mirar con amor ese aspecto bien cuidado
Que presenta el que quiere enamorarnos,
Sin tener  que asistir luego al hechizo
De ver que al desprenderse de sus prendas
No es mas que el compañero que en la cama,
Duerme con nosotros cada día, y roncando.


Que fácil es amar al escondite,
Reclamando la pasión del que transgrede.
Ese sabor de mas que da el pecado
Ese placer que es compartir con otro un secreto
Y hacer con el secreto un aliado
al que no se le pide otra cosa que guardarlo.


Que fácil es amar sin compromisos
Sin mas comunidad que el disfrute.
Y verter sobre el tiempo que no tienes
Fantasías de una vida que tuviera
Lo que en tu vida real no has logrado.


Que fácil es amarse por un tiempo
Sin mas planes que buscar el próximo momento.
Que buscar el beso escondido,
Que decirle al otro, en un aparte, un te quiero,
Que despedirse del otro hasta mañana,
Y notar con la última palabra
como bulle el deseo no saciado.


Que fácil es
Y que poco cierto.

(V)

Amor Enfrentado


He renegado de ti varias veces esta tarde
He sentido ganas de gritarte, de insultarte.
Al final me encontraba muy turbado
mientras tu me ofrecías tu actitud indiferente.
No entiendo que nos pasen estas cosas,
no entiendo esa pasión que nos embarga,
ese afán que nos lleva a herirnos tan profundo
como solo puede herir un total conocimiento,
que nos nubla la razón de cualquier discernimiento.
No importan, mientras salen, las palabras,
y una vez dichas duele tanto haberlas dicho
como duele el tener que escucharlas.
Nos damos después la vuelta
como si el volverse llevara a la ignorancia
pero no es la ignorancia lo que encuentro,
no es la ignorancia, ni el olvido, ni el desprecio,
es solo una suerte de suplicio, un anhelo,
el de hacer que ese instante no ocurriera,
poder volver atrás todo este tiempo
y al revivir saltarme ese momento.
Supongo, no obstante, que el amor necesita desfogarse,
Que lo cotidiano propicia el desencuentro
Que el día a día se transforma en desacuerdo,
que la disputa es un resplandor que ilumina el reencuentro.
pero aun así, aun sospechando que ese sea el motivo,
en esos momentos prefiero un amor menos intenso.


(IV)

Amor de Madrugada


Era ya de madrugada y senti que mi mano te buscaba,
buscaba a tientas el calor que tu cuerpo despedía.
Era una mano ansiosa, una mano de mañana.
Te vi entonces, entre las brumas de mi sueño
aferrada con un rictus de cansancio a la plancha,
sumergida en un rigor de niños y coladas,
desplomada en el sillon tras la jornada cotidiana
buscando el descanso que tu cuerpo demandaba.
Le dije al instante a mi mano que volviera,
le explique lentamanete, sin palabras:
“Esta noche su placer esta en el sueño,
y mi placer, esta noche, es que descansa.”


(III)

Amor de Mañana


Mañana a la mañana
mi mano paseará por tu contorno,
caliente tu cuerpo aún de sueño,
buscando tus pechos, impaciente,
aferrándome a ellos
con el tacto y el apremio que provee mi deseo
pellizcando los pezones un apenas,
y un apenas deteniendo mi paseo.
Seguirán mis manos buscándote entre velos,
de tela unos, otros de sueño,
deseando mas a cada instante,
un contacto mas directo,
y deslizándose buscará el borde de tu atuendo.
Como buscará tu boca
que tu hurtarás insegura de tu aliento.
Y una vez conquistada tu piel,
piel con piel,
buscará de nuevo los lugares, nerviosa y suave.
Remontando el ombligo de nuevo tus pechos
y cerniendo el vuelo, bajando pausado,
acechando la presa como un carnicero
bajara mi mano buscando tu Venus,
y entre rizos que enreden mis dedos
acariciaré tu sexo, aun tibio, pero ya dispuesto.
Mi sofoco jadeara en tu oído todo mi deseo
queriendo arrancarte al fin de tu sueño,
y poco a poco, como sin quererlo,
de los de Morfeo pasaras hasta mis brazos con el ultimo bostezo,
y el tuyo y el mío, se harán un solo cuerpo.


(II)

Amor Nocturno (19-04-1997)


Cuando las carnes se encuentran
fugazmente, durante la noche,
estando los cuerpos dormidos,
entre el tacto febril que en las sabanas deposita el sueño,
y de debajo de nuestros cuerpos suben,
sin alcanzar la consciencia,
vaharadas de calor humano,
fiebres en forma de sueños,
humedad de sudor que retiene el sudario.
Cuando, repito, las carnes se encuentran,
rozándose apenas en el tiempo,
sin que el instante se prolongue,
sin que llegue a crecer el deseo,
sin que el sueño se despierte,
sin que la oscuridad se alumbre,
la soledad es solo un concepto,
un fantasma que espanta tu cuerpo.


(I)

Amor Imaginado (Infidelidad)


No te he sido fiel,
Cuando el sexo me apretaba las entrañas
Cualquier cuerpo que saliera a mi encuentro,
Sin un roce, sin una mirada
Provocaba en mi al pensamiento.
Aún sin tocar su cuerpo te engañaba.
No en el amor que no la amaba,
Ni en la pasión, que no sentía,
Pero si en la experiencia deseada,
Si con la imaginación, que trastocada,
Me llevaba a imaginar los rasgos del clímax en su cara,
Los temblores de su vientre al rozarla,
La humedad de su vulva penetrada,
El desgarro del placer al expresarse en su garganta.


(VIII)